sábado, 28 de septiembre de 2013

28 de Setembro, ou moitas décadas

Fai unhas semanas encontrei na casa dunha compañeira o libro de "Mafalda inédita". Pedinllo como tesouro para antes de durmir, e descubrín tiras que Quino non publicara, e comentarios que facía sobre elas. A maioría do material era das décadas dos 60 e 70, e tiven a sensación de que a Terra coa que Mafalda ten tantas conversas deixara outra vez de xirar, e estabamos paradas no tempo.

Ese mesmo día, na mesma casa, descubrín unha revista do 2001 perfectamente conservada. Cambiaba un
pouco o estilo de impresión, e a xente famosa que segue a ser famosa aparecía máis xoven, pero o contido era o mesmo que o de calquera revista semanal actual. Na penúltima páxina, un artigo de Shere Hite, co título "Intimidad sin sexualidad entre mujeres"* Outro tesouro.

Shere Hite. Galería.
Cando o lin imaxinei o controvertido que tivo que ser todo este texto fai 12 anos (ao estilo de Shere Hite, por iso lle teño este cariño). Logo resitueime máis dunha década, e caín en que hoxe segue a ser controvertido, d o c e  a n o s  despois.

Gostaría de falar con Mafalda para que me conte que tal está hoxe que é 28 de Setembro, do 2013, e como ve isto de que siga a lexislarse sobre o noso corpo, sobre como o habitamos e que facemos con el; isto de que queiran facernos retroceder décadas, ata séculos; que tal lle foi a vida, como foi vivindo ela o de ser muller(es); como se vincula con outras; que me conta do amor, da amizade, do pracer... Como foi inventándose as relacións e a vida, e que revolucións anda facendo; que plans ten para que non sigan a facer falla revolucións doce anos despois. 

Estou segura de que reiríamos moito moito, e ata choraríamos, e mollaríamos doces ricos no café.

Intimidad sin sexualidad entre mujeres. Shere Hite.
Si durante los últimos 25 años las mujeres se han transformado a sí mismas y han modificado sus relaciones con los hombres, un aspecto menos conocido es en qué medida han afectado esas alteraciones a las relaciones con otras mujeres. Según mis investigaciones, los cambios introducidos por las mujeres en sus vidas están transformando de manera muy clara sus relaciones con el mismo sexo. 
Según las estadísticas, hoy día muchas mujeres viven solas (igual que muchos hombres); de hecho, la mitad de la población en la mayoría de los países occidentales vive sola. Las mujeres, muchas veces, poseen una amiga íntima con la que sí tienen una buena relación. Las mujeres podrían obtener mucho más placer físico y más intimidad con sus amigas, con otras mujeres, de lo que lo hacen. Por ejemplo, ¡por qué no pueden unas amigas estar echadas juntas en el sofá, abrazadas mientras ven la televisión? ¿O dormir juntas? Si alguien las viera, su reacción podría ser pensar que mantienen una relación sexual. Pero pensar eso es plantear la situación en términos de disyuntiva, una dicotomía que no es necesaria. 
En nuestra sociedad se nos dice que sólo podemos tener una intimidad física intensa con una pareja sexual. Ahora bien, si hoy, en Europa, la mitad de la población vive sola, ese sistema no puede seguir aplicándose. Diversos estudios han demostrado que los recién nacidos a los que no se abraza pueden morir. Sin embargo, cuando somos adultos sólo se nos permite abrazar con todo el cuerpo, de la cabeza a los pies (durante algo más que unos cuantos minutos), a una pareja sexual. ¿Por qué? ¿Por qué no podemos abrazar estrechamente el cuerpo de una amiga durante media hora, o acostarnos juntas? (este contacto de todo el cuerpo, tan importante, necesita un nombre...) Ello no querría decir que se tratase de una relación lesbiana (no incluiría la intimidad erótica ni el orgasmo), aunque una intimidad física seria y prolongada sí lo sería. 
Yo propongo una nueva institución social, una nueva categoría social o un tercer tipo de relación entre mujeres. En ella, las mujeres podrán tener una nueva forma de relación física y no considerarla una cosa secundaria ("mientras espero a encontrar a un hombre, casarme y echar raíces", o alguien a quien llamar y con quien hablar cuando su marido no está, "hasta que llegue a casa"), sino un elemento fundamental en sus vidas, una compañía primordial (y no oculta, sino motivo de orgullo, y si quisieran, podrían seguir teniendo relaciones con hombres). Quizá piensen en comprar una casa juntas, construir un hogar y una familia. Al fin y al cabo, ¿por qué dos mujeres no pueden, como amigas, comprar una casa y tener un proyecto de vida en común? 
Esta nueva institución cambiaría la perspectiva psicológica femenina. Las mujeres no tienen por qué ser automáticamente rivales y enemigas. Los fundamentos psicológicos de la rivalidad son programados. Por ejemplo, cuando una mujer entra en una habitación (como en una reunión de trabajo o una fiesta), otra que la vea entrar puede pensar, de forma automática: "¿Es más guapa que yo? ¿Más joven?" 
¿Qué pasaría si una mujer pensara, por el contrario: aquí viene una mujer? ¿Aportará algo bueno a mi vida? ¿Cómo querría relacionarme con ella?". Si es guapa, la mujer podría intentar pensar: "Es muy atractiva. Me agradaría que fuese mi amiga o compañera, me gustaría tocarle el pelo o cogerla de la mano" (en vez de imaginar: "Le ha dedicado mucho rato a su aspecto para resultar atractiva a los hombres que están en la sala"). ¿Por qué no puede imaginar una mujer, al ver a otra que entra en una habitación con un grupo de gente, que la recién llegada está ofreciéndole su belleza, su encanto y su viveza a ella (y no sólo a los hombres)? 
Muchas mujeres carecen de la autoestima necesaria para pensar que otra esté dispuesta a actuar así. "De todas formas, ¿no sería una relación lesbiana?"... Una vez más, el miedo al rechazo que sienten inconscientemente muchas mujeres está unido a aspectos corporales, se remonta a los tabúes que han aprendido de niñas con sus madres. Aunque muchas mujeres mantienen una amistad excelente, no logran verse mutuamente como posibles compañeras de vida. No se preguntan: "¿Podría construir mi vida con ella? ¿Querría comprarme una casa con ella? ¿Sería una buena socia en el trabajo?". Tampoco se imaginan celebrando aniversarios de su unión ni presumiendo ante los demás de su fructífera relación. 
Podría haber muchas relaciones con formas satisfactorias de intimidad física que no consisten en sexo, pero nosotras mismas nos impedimos verlas. Esta nueva institución social para las mujeres -ni lesbianismo ni simple amistad, sino un tercer tipo de relación- es un paso lógico hacia adelante para las mujeres de hoy.


*A sexualidade é algo que forma parte de nós, e fai referencia ao conxunto das nosas características como seres sexuados, polo que é algo que sempre temos, e que non podemos non ter. No artigo Shere Hite refírese á parte da sexualidade que adoitamos identificar como "erótica" ou "sexual" (aínda que tamén apunta que ambas poden ser máis amplas do que habitualmente consideramos).

lunes, 16 de septiembre de 2013

Xoguetes n'As Marías & xogos con ritmo Electrolatino!

Sábado completo dos que desfruto intensamente: Tuppersex no Bar As Marías, en boa compañía de todas as mulleres diversas que asistiron, moitísimas grazas a todas! E ao rematar, despois dunha chamada sorpresa, un segundo Tuppersex con este grupo de mulleres divertidísimas, curiosas, acolledoras, participativas... Tuppersex ElectroLatino!

Un gusto, e moitísima sorte María na túa nova aventura :)


domingo, 1 de septiembre de 2013

Tuppersex en As Marías Bar!

Estivemos debuxando na famosa pizarra de As Marías para que saibades deste Tuppersex de verán, con espazo reservado, o noso Outlet en súper rebaixas, un trato de luxo e terraciña onde continuar a noite. Quen da máis?

Este sábado 14 de Setembro, convidadísim@s estades!